S-Nebadonia – Estén en mi amor- 27Feb2011 - Monjoronson.com Paul Conklin
Maestra: Nebadonia
Tema: Estén en mi amor
T/R: Paul Conklin
27 de Febrero 2011
[Prefacio del T/R: queridos amigos, acabo de recibir este profundamente conmovedor mensaje de Nebadonia. Sus palabras son poderosas y conmovedoras. Sus palabras nos mueven a hacer lo que está en nuestros corazones]
Mi querido niño, esta es tu madre Nebadonia y estoy muy complacida contigo. Pero amo a todos mis hijos. Veo a muchos de ellos luchando en este planeta. Veo a muchos de ellos gritando para ser oídos, para ser contados, para ser validados. Ellos son tan importantes para mí como lo eres tú hijo mío.
Un niño que nace en el arbusto completamente desconocido y olvidado por el mundo. Viven sus vidas desconocidos y desatendido por el mundo. No hay monumentos dejados atrás por ellos. Cuando mueren es como si nunca hubiesen existido. O al menos eso parece. Cada niño nacido, cada niño que lucha para vivir, para respirar, para existir, vive siempre aún después que muere. ¿Debiera ser de otra manera mis niños? Hay tantas disparidades en este mundo. Pareciera que algunos son más importantes que otros.
Pero te digo esto mi niño que así como caen las hojas de los árboles en otoño y se posan en el suelo, finalmente ellas se secan y vuelven a la tierra. Así también todos ustedes niños son como las hojas que caen en otoño de sus ramas cayéndose en la tierra y desaparecen para convertirse en uno con la tierra de nuevo. Esto no es distinto si las hojas de otoño cae sobre un monumento de piedra o lejos en la tierra estéril, fuera de la vista, invisible e inadvertido.
Porque todos ustedes mis hijos deberán morir. Pero mientras están aquí ¿qué harán? ¿Juntarán las hojas de otoño que se caen al suelo? ¿Las almacenarán y las volverán a su vigor juvenil una vez que estén restauradas? Cuando las hojas de otoño caen al suelo se almacenan cerca de mi pecho. No se perderá ninguna. Ninguna carece de importancia, ni es olvidada, ni mal usada o abusada.
Cuando ven a una persona sin hogar, sucia y marchitada ¿Creen que el Eterno se ha olvidado de ellos? ¿Caminan rápido con la esperanza de evitar todo contacto? ¿Qué les ha salido tan mal en la vida que los ha llevado a ese punto? Las razones son muchas y variadas. Pero aunque estén lejos de cualquier centro de atención o notoriedad, el Padre arroja luz sobre ellos. Porque un día El los deberá llamar de lo alto y los liberará de su sufrimiento. Pero ¿Pueden ustedes hacer eso ahora mis niños? ¿No pueden tomar las hojas de otoño de sus almacenes y darle a los que no tienen nada? Por que ¿no saben que cuando sus exhalaciones alcanzan el cielo que también las exhalaciones de ellos se mezclan con las de ustedes?
Por lo que ¿son realmente tan diferentes mis hijos? inhalan y exhalan. Ponen un pie delante del frente del otro. Cada uno tiene un corazón que late y que bombea sangre a través de su sistema circulatorio. ¿Por qué no han caminado en sus zapatos? ¿Eres un nomina, una tragedia, un depresivo sacado de su difícil situación? Las hojas de otoño son una representación del amor que reside en todos sus corazones. ¿Sacarán ese amor de sus almacenes y lo darán libremente? Porque este es su campo de entrenamiento. Aquí es donde primero aprenden a amar.
Siempre les digo hijos estén en mi amor. Les estoy enseñando que es difícil para ustedes aprender en este mundo. Pero a medida que maduren, a medida que crezcan, expresen su amor será tan natural como respirar dentro y fuera. Dejen que su amor sea tan natural que incluso no noten cuando lo irradian. Es como su aparato respiratorio. En la mayor parte no prestan atención a menos que suceda algo que les provoque una pausa. Si su respiración se acorta y sienten un dolor que irradia desde el centro de su pecho, temen que están teniendo un ataque al corazón. ¿Qué se siente como estar solo, no amado, pasar desapercibido y olvidado por el mundo? Se siente como si su respiración se ha detenido. Se siente como si han dejado de vivir. Mis hijos, ustedes tienen mucho poder. Son como médicos que pueden actuar inmediatamente para prevenir un ataque al corazón. Para prevenir la muerte repentina de sus pacientes. Porque cuando dan amor libremente sin preguntar, sin necesitar recompensa, están extendiendo el amor del Padre y están expandiendo mi amor que descansa en su pecho y en su corazón.
Veo todas las hojas de otoño colgando en sus ramas con su última pizca de fuerza. ¿Mantendrán a flote sus esperanzas y restaurarán sus espíritus? Desde Kuala Lumpur a Bangladesh, desde los bosques tropicales de Brasil a las ciudades cosmopolitas del mundo occidental los veo a todos como hojas de otoño aferrándose a un enorme árbol. ¿Liberarán el amor que existe en sus corazones? Porque cuando liberan el amor que existe en sus corazones están restaurando ese enorme árbol para el bienestar y la integridad. Porque todos son una parte de ese enorme árbol. Todos están interconectados. No están separados.
Porque la respiración de los oprimidos sube hasta el cielo y se mezcla con la de ustedes. ¿Les dirán a sus hermanos que estén en su amor? ¿Lo demostrarán con sus acciones? ¿Lo demostrarán por su amor? Yo soy tu madre, Espíritu soberano de Nebadón, sin embargo para todos los de mi destreza y capacidad intelectual no soy nada si no conocen el amor. Porque todos sus logros y todas sus obras no son nada si no conocen el amor.
Lideren el camino mis hijos. Muestren a sus hermanos que profundo en sus corazones y profundo en el corazón de ellos están las fuentes del amor eterno. Dejen que beban de las fuentes de su amor en su humilde planeta. Su amor asciende a mí en lo alto y mora en mi corazón. Estoy muy complacida con todos mis hijos. Se que a menudo digo estén en mi amor, pero sé que un día dirán lo mismo. No serán más discriminados. Cada cosa que respira, cada hombre, mujer, niño estarán en su amor. Tomen las hojas de otoño de sus almacenes y denlas libremente. Tomen el amor en sus corazones y denlo, repártanlo.
Mis queridos hijos, por siempre y siempre, estén en mi amor.
FIN