S-Siraya – Salgan de las Sombras – Feb 26, 2011 Monjoronson.com Paul Conklin
Maestro: Siraya, Espíritu Rector Número Uno
Tena: Salgan de las Sombras
T/R: Paul Conklin
26 de Febrero de 2011
[Prefacio del T/R: queridos amigos, anoche recibí dos mensajes de Siraya. Supe que quería que transcribiera otro mensaje, pero estaba cansado y tenía que levantarme temprano. Escuché las palabras arriba como el tema de su charla. Supe que este sería el tema y estuve oyendo fragmentos de la misma todo el día. Cuando me senté a tipear esto es lo que salió. Es muy conmovedor y bello. Siraya está vertiendo la luz del Padre en nuestro planeta y estoy muy agradecido]
Mi querido niño este es el Espíritu Rector Número Uno, Siraya. Esta noche hablaremos sobre emerger de las sombras de la rebelión de Lucifer. Imaginen que ven a un niño llorando. El niño no sabe donde ir. El niño no sabe que hacer. Todo lo que el niño conoce es la oscuridad. Todo lo que el niño conoce es la brutalidad de su existencia. ¿Hay alguien por ahí que pueda oír los gritos del niño? ¿Hay alguien que se preocupe?
Es como si el niño se arrastrara en la oscuridad, incapaz de escapar de su nefasto entorno. El niño solo conoce la oscuridad. El niño solo conoce el sufrimiento y el dolor. Mientras se acomoda en su jaula de oscuridad, ve un puntito de luz. Es muy curioso porque nunca ha visto tal fenómeno. Teme la luz porque nunca la ha visto antes. Piensa que algo malo vendrá a él si se acerca a esa luz.
Huye de la luz porque la oscuridad es todo lo que conoce. Nunca ha vivido en la luz, por lo que debe ser mala, la luz debe ser abrumadora. Cuando el sol se levanta se escabulle de nuevo en su habitación y corre las persianas. Apaga la luz por temor a que no pueda soportarla. Se esconde en un rincón con el terror marcado esperando por el reconfortante manto de los cielos nocturnos.
Mis queridos niños, todos de Urantia, son como pequeños niños sumergidos en la oscuridad. Esta oscuridad que ha rodeado sus almas por muchos milenios. La rebelión de Lucifer es lo que sumió a su planeta en la oscuridad. Es todo lo que siempre han conocido. Ahora divisan un puntito de luz tratando de invadir sus moradas. Se levantan de sus camas y miran con curiosidad. ¿Qué es esto, dicen? Nunca había visto esto antes. Creen que la luz los cegará y les quitará su voluntad.
Les digo esto mis niños, salgan de las sombras que han encadenado sus almas y aprisionado su espíritu. No teman que se levante el sol y todas sus glorias. Huyan del miedo y huyan de la oscuridad. Porque la oscuridad no los puede dañar más. Salgan de las sombras en las que se han estado escondiendo por muchos años. Vengan a la luz del día y parpadeen. Parpadeen sus ojos para que se adapten a la libertad recién descubierta. Pongan sus manos sobre sus ojos a medida que se adaptan al brillo de la luz. En solo un momento se adaptarán al brillo.
El tierno corazón del Padre de todos nosotros ha oído sus llantos. Los ha observado mientras se escondían en sus rincones oscuros temiendo pisar la luz de un nuevo día. El sabía cual era el momento correcto para actuar y es ahora. De no arrastrarse más tiempo y quedar sin rodillas. Sequen sus lágrimas y griten con alegría. Emerjan de las sombras que mueren con el sol naciente. El sol naciente es el Eterno. El Eterno será por siempre su luz. Nunca más se esconderán en los rincones oscuros ni se escabullirán de la luz.
He vuelto mi atención a su mundo para que pueda brillar la gloria de su Padre Eterno sobre su humilde mundo. Estoy subiendo el brillo para que las sombras ya no existan más. Buscarán su sombra en la acera bajo el brillante sol del medio día, pero ya no la encontrarán. No la encontrarán más porque el Eterno quemará la oscuridad de sus almas.
Mis queridos niños, su sufrimiento no ha sido en vano. Es como un regalo que asciende al Padre en lo alto. ¿No creen que el Infinito aprecie todo lo que ha pasado? ¿Creen que no le importa? ¿No creen que serán bien compensados por la oscuridad que ha habitado sus almas por tantos años? ¿No creen que el Eterno ha visto sus lágrimas y quiere secarlas?
Salgan de los agujeros de su prisión y tiren de sus cadenas. Alcancen ese pequeño puntito de luz que ven a la distancia. Sujétenlo firmemente en sus manos y no lo dejen ir. No dejen que funcione el miedo y vuelvan a sus oscuros rincones. No hay nada que temer porque la luz está llena de amor y de bálsamo de sanación. Están siendo sanados ahora. Los venenos que los han infectado por tanto tiempo están siendo filtrados de sus sistemas. La luz busca a través de ustedes y descubre cualquier área que esté afectada y las restaura a su equilibrio adecuado.
Cuando estén sanados serán capaces de ponerse de pie otra vez. Emergerán de las habitaciones de la oscuridad y sus sombras deberán huir de ustedes. Sus sombras deberán huir de ustedes porque estoy derramando en su mundo la gloriosa luz del Eterno.
Había una vez un niño que lloraba en las esquinas estériles, un niño que rechazaba la luz. Agarró ese puntito de luz y no lo dejó ir. Se levantó de sus rodillas y abrió la puerta donde el sol brillaba. Cuando vio la luz por primera vez cayó de rodillas otra vez, esta vez llorando lágrimas de alegría. Salió de las sombras que se colgaban de él como un manto manchado en tinta.
Oh, preciosos niños de Urantia, emerjan de las sombras que mueren con el sol naciente. Porque en este día la oscuridad no dominarán más sus vidas. Porque la gloriosa luz del Padre se está derramando en su humilde esfera. Adapten sus ojos y parpadeen. Protejan sus ojos hasta que se acostumbren a su frecuencia. Porque en este día saldrán de las sombras. Porque esto es lo que el Eterno ha dicho: “Emerjan de las sombras que mueren con el sol naciente y abracen la verdadera luz” “la verdadera luz que brilla desde la eternidad”
Este es Siraya la Voz del Padre y digo que salgan de las sombras y sean abrazados por la gloriosa luz del Padre. Dejen que las sombras mueran y déjenlas que renazcan de la luz del Padre que arde eternamente. Haré mi salida ahora hasta otro momento.
FIN